Muchas personas con lupus experimentan fatiga o se sienten cansadas durante el día. Para algunas personas, la fatiga puede dificultar la realización de actividades cotidianas como ducharse, preparar la cena o ir al trabajo.
La buena noticia es que hay pasos que puede seguir para sentirse mejor. Al comprender y trabajar con los límites de tu cuerpo, puede aprender a vivir bien con la fatiga del lupus.
Habla con tu médico
Habla con tu médico acerca de cómo la fatiga afecta tu vida diaria. Tu médico puede realizar algunas pruebas de diagnóstico (como análisis de sangre) para asegurarse de que tu fatiga no se deba a otra afección, como un problema de tiroides o niveles bajos de hierro en la sangre (anemia). Pídele a tu médico consejos y recursos sobre cómo lidiar con la fatiga del lupus.
Planifica con anticipación
Elige las actividades que son más importantes para ti y planifica tu día en torno a ellas. De esa manera, puedes hacer las cosas más importantes y hacer tiempo para descansar cuando lo necesites.
Al hacer tu lista de tareas pendientes, decide qué tareas son las más importantes y acéptalas primero.
Planifica tiempo para descansar a lo largo del día.
Compra en línea cuando puedas. Cuando necesitas hacer diligencias, intenta hacerlos todo en un solo viaje y planea tiempo para descansar después. Si es posible, elige la opción de recoger tus artículos, en la tienda o en un lugar de autoservicio, para evitar caminar por la tienda y posiblemente esperar en largas filas.
Planifica y prepara las comidas con anticipación cuando puedas. Por ejemplo, puedes cocinar porciones adicionales de una sopa o guiso y congelarlas para más adelante.
Elige las actividades sociales que son más importantes para ti y siéntete libre de decir “no” al resto.
Puede ser frustrante sentir que no puedes hacer tantas cosas como deseas debido a la fatiga del lupus. Recuerda que tener lupus no es tu culpa, y que te sentirás mejor a largo plazo si pones tu salud en primer lugar.
Construye hábitos saludables
Hacer estos cambios en tu rutina diaria puede marcar una gran diferencia en cómo te sientes.
Has ejercicio durante unos minutos todos los días. Las actividades de bajo impacto como el yoga, la natación y el ciclismo son buenas para las personas con lupus porque son fáciles para los músculos y las articulaciones.
Dormir lo suficiente.
Come comida saludable. Escucha a un nutricionista sobre cómo comer bien con lupus.
Si fumas, consulta a tu médico para que te ayude a dejar de hacerlo.
Fuente: Lupus.org
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